Se nos ha contado una y otra vez que el bufón de la corte era el único con la facultad […]
Para quienes defendemos la dignidad humana y la libertad de expresión como valores esenciales de una sociedad democrática y libre, […]
El intelectual Axel Kaiser, presidente de la Fundación para el Progreso, conoce desde hace años a Javier Milei. Hace escaso tiempo observó […]
Este 3 de mayo se celebró un nuevo Día Mundial de la Libertad de Prensa. Su celebración tiene como objetivo […]
«¡Abajo el comunismo!», fue la frase que hizo reventar las redes sociales tras la presentación de la agrupación Gente de […]
La libertad de expresión está amenazada, ya no tanto por la mordaza del Estado sino por la censura social que reclama para sí el monopolio de la verdad y de lo políticamente correcto. Lucía Santa Cruz, Mauricio Rojas y Eduardo Sepúlveda reflexionan sobre los principales desafíos de la libertad de expresión en nuestro tiempo.
Ante el riesgo que enfrenta el principio de subsidiariedad en el debate constitucional, deberíamos concentrarnos en las corrientes intelectuales que lo promueven y defienden.
En tiempos donde la corrección política ha extremizado posturas, alejando los puntos de encuentro y poniendo énfasis en el odio propio y en los sentimientos vulnerados, una discusión seria sobre el hate speech es necesaria.
Si queremos una sociedad civilizada debemos poner a la razón como el instrumento central de juicio y desplazar el sentimentalismo del debate público.
Señor Director: Temo que Carlos Williamson no solo confunde conceptos, sino también todo el punto del debate. Jamás he sostenido, […]
El neoliberalismo, este no es más que el sucesor -algo empobrecido- del liberalismo originario, y sus resultados, como ha mostrado Deirdre Mccloskey, han sido parecidos: una explosión sin precedentes en la historia humana en el progreso económico y social de la población, de lo cual nuestro país es un irrefutable ejemplo.
la primera tarea de los liberales debe ser acabar con la inflación legislativa y el afán compulsivo de crear leyes a destajo que hoy priman en nuestro Congreso.
La libertad de prensa es la manifestación misma del escepticismo ante el poder, y por lo tanto garante supremo de todas nuestras libertades.
«La libertad no se pierde por
quienes se esmeran en atacarla, sino por quienes
no son capaces de defenderla»