La libertad de expresión está amenazada, ya no tanto por la mordaza del Estado sino por la censura social que reclama para sí el monopolio de la verdad y de lo políticamente correcto. Lucía Santa Cruz, Mauricio Rojas y Eduardo Sepúlveda reflexionan sobre los principales desafíos de la libertad de expresión en nuestro tiempo.
En tiempos donde la corrección política ha extremizado posturas, alejando los puntos de encuentro y poniendo énfasis en el odio propio y en los sentimientos vulnerados, una discusión seria sobre el hate speech es necesaria.
La libertad de prensa es la manifestación misma del escepticismo ante el poder, y por lo tanto garante supremo de todas nuestras libertades.
«La libertad no se pierde por
quienes se esmeran en atacarla, sino por quienes
no son capaces de defenderla»