Para nadie es un secreto que en los últimos 2 años la política chilena -al menos en su forma tradicional- se ha degradado enormemente. Los parlamentarios y todo aquel que quepa dentro de la categoría de “político” ha caído bajo un tremendo cuestionamiento.
Leer másEl gran argumento que dan algunos de estos intelectuales en favor de una Constitución mínima es que lo verdaderamente democrático es que todo eso lo decida el Congreso. Pero olvidan que en Chile la democracia se terminó destruyendo, precisamente, porque esas cosas las podían decidir los parlamentarios.
Leer másEsperemos tener un oficialismo firme y una oposición con capacidad de diálogo. Un país desarrollado debe dejar de lado el fanatismo ideológico frente a los problemas ciudadanos y tener la capacidad de conversar. La democracia necesita de diálogo abierto, de miradas de largo plazo, y no de egoístas disputas parlamentarias. Los ciudadanos esperan que sus representantes muestren que son capaces de dirigir un país. Chile no necesita fútiles disputas, necesita avanzar. La clase política debe pasar de las batallas al diálogo.
Leer másEn algún punto se encontrarán con los que sí estudiaron e hicieron lo que tenían que hacer, y con ellos no podrán competir.
Leer más«El progreso no es una bendición ininterrumpida.
A menudo viene con sacrificios y luchas»