Jorge Gómez, Investigador Senior FPP, señala que quemar una iglesia es una profanación cívica y democrática porque va de lleno contra la libertad de conciencia. ¿Qué clase de discusión constitucional podemos tener si no existe el respeto básico a la libertad de conciencia?
Chile pareciera haber rápidamente involucionado, a punta de una ciudadanía barbárica e irrespetuosa de las libertades más básicas, para colocarse dentro de aquel trágico grupo de países con Estados débiles o fallidos.
«La libertad no se pierde por
quienes se esmeran en atacarla, sino por quienes
no son capaces de defenderla»