Inicio » Columnas » Progresismo tragicómico
Progresismo tragicómico Publicado en El Mercurio, 16.03.2025

Progresismo tragicómico

José Luis Ábalos, ministro del partido socialista español (PSOE), fue uno de los que discurseó en la moción de censura que destituyó, por el caso de corrupción denominado Gürtel, a Mariano Rajoy y que declaraba en un video que el feminismo está en el ADN del socialismo. Esto antes que lo denunciaran por mantener con dineros fiscales un pequeño bulín a pasos de su despacho ministerial donde residía Jessica, una abnegada trabajadora sexual que oficiaba durante el día como funcionaria de gobierno pagada por todos los contribuyentes y durante la noche como escort del ministro. 

«Todo lo que estamos sufriendo en materia de delincuencia es responsabilidad del progresismo que homenajeó a la primera línea, indultó delincuentes e intimidó a carabineros, a punta de querellas e insultos, al poder político a punta de acusaciones constitucionales y a los jueces frustrando su carrera».

Ábalos se agrega a los fundadores del Podemos español (inspirador de nuestro Frente Amplio), Iñigo Errejón y Juan Carlos Monedero, ambos feministas de marchas y videos, y ahora acusados por varias fechorías sexuales. Por estos lados el famoso ideólogo del frentamplismo y por cierto también autodenominado feminista don Carlos Ruiz acusado de golpear a su pareja y el nunca bien ponderado Manuel Monsalve, acusado de violación.

Estos son ejemplos de lo que en biología evolutiva se denominan los sneaky fuckers. Fenómeno que se da en algunas especies como en ciertos peces en que machos adoptan ademanes de las hembras para evadir al macho alfa y subrepticiamente mezclarse en el cardumen para aparearse furtivamente. 

Esta odiosa duplicidad no se limita sin embargo al feminismo. Pareciera que se trata más bien de un patrón de conducta de esta nueva izquierda autodenominada progresista, y que se abanderiza en público con la probidad, el feminismo, el desprecio al lucro, el compromiso con la paz, el respeto a las preferencias sexuales, etc. Esta postura pública contrasta con su comportamiento privado en que se parecen mucho a la antigua izquierda, que gritaba «los momios al paredón y las momias al colchón» o a la del Che Guevara que mandaba encarcelar o matar a los homosexuales.

Hagamos un poco de memoria. Primero Giorgio, el filántropo, que proclamaba las virtudes de las donaciones para descubrir después que en realidad se donaba a sí mismo. O el inolvidable Pelao Vade que posaba de enfermo de cáncer para posteriormente enterarnos que todo era un fraude. Ahí estuvo RD, un partido insigne del FA quedespreciaba el lucro en público, mientras en privado creaban fundaciones diseñadas para lucrar y defraudar al fisco. Sigamos con el verso de terminar con los pitutos en que los chats de Catalina Pérez con su pareja Daniel Andrade, develaron la versatilidad laboral de Andrade, un maestro chasquilla del servicio público, a quien todas las micros le servían o el nombramiento de esas figuras consulares de la diplomacia chilena Beatriz Sánchez y Susana Herrera como embajadoras en México e Inglaterra respectivamente. Y ahora Karol Cariola que declamaba en el Congreso a favor de la probidad y la transparencia mientras en privado le da un nuevo significado a la palabra influencer, terciando favores para empresarios chinos que financiaban su campaña. Pero indudablemente el más creativo fue el empresario Daniel Jadue, que con dineros de los vecinos del municipio llevó a la quiebra su farmacia popular, lanzó con fanfarria una universidad popular que nunca existió y después tuvo la suerte, que la prueba que lo incriminaba en un caso de corrupción se «extravió». A eso se agrega el ministro de Hacienda, un David Copperfield de las finanzas, que, ayudado por la mejor directora de presupuesto de la historia, cuadra su balance sacando del sombrero, o más bien desde la Corfo, los fondos destinados a la innovación y desarrollo tecnológico.

El caso de la casa de Allende es de antología, una senadora y una ministra de Estado violan la Constitución, para venderle una casa al Estado que éste se la devolvía con un comodato para que su propia fundación la administrara. Pero además lo hacían entre pascua y año nuevo o más bien entre gallos y medianoche, igual que los indultos para pasar piola. La verdad es que este es como el gobierno del Japenning con Ja, pero tragicómico.

Por eso frente a la delincuencia, le creo poco a este gobierno su intención de perseguirla. Ahí estaba la ex ministra Tohá, definiendo la ley de usurpaciones como la del «gatillo fácil», cuando los únicos que sufren los disparos son los dueños de fundos, incluido un matrimonio inocente acribillado a balazos esta semana en su casa en Graneros. Todo lo que estamos sufriendo en materia de delincuencia es responsabilidad del progresismo que homenajeó a la primera línea, indultó delincuentes e intimidó a carabineros, a punta de querellas e insultos, al poder político a punta de acusaciones constitucionales y a los jueces frustrando su carrera cuando no eran de su agrado. Ojalá nos acordemos de todo esto cuando vayamos a votar.

Las opiniones expresadas en esta publicación son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan las de Fundación para el Progreso, ni las de su Directorio, Senior Fellows u otros miembros.

ÚLTIMAS OPINIONES

Falacia de los extremos

Señor Director: Solo he votado por Chile Vamos en el pasado, cuestión que no haré este año. Y es que […]

Publicado en El Mercurio, 16.03.2025
Falacia de los extremos

El Proyecto Tumba

Sigue adelante el Proyecto Tumba y su desengaño: la «tumba del neoliberalismo», anunciada con entusiasmo por Boric, sigue consolidándose como […]

Publicado en El Mercurio, 16.03.2025
El Proyecto Tumba

«Gas a precio justo»

Señor Director: Don Diego Pardow, ministro de Energía, justifica el programa «Gas a precio justo» en un informe de la […]

Publicado en El Mercurio, 16.03.2025
«Gas a precio justo»

«La libertad no es un regalo de Dios,
sino una conquista humana»

Súmate a la FPP

¡ Chatea con nosotros !