La política como profesión
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Publicado en El Mercurio, 05.04.2023Señor Director:
Me refiero a la carta de ayer de los peritos físicos (no balísticos) Soto y Mujica, cuyos tuits (hoy convenientemente borrados) muestran una parcialidad política incompatible con su labor pericial. El señor Soto, en el juicio oral del capitán Maturana, declaró que la probabilidad de impactar en la cara a 51 metros era entre 4 y 5% (está grabado). En su carta de ayer (donde intentan desacreditar mi columna), señalan mañosamente que la probabilidad de pegarle al cuerpo a alguien a 51 metros es de 40%. Pero la discusión es sobre la cabeza/rostro —que es 1/8 del cuerpo—, por lo que no hay contradicción con lo indicado por mí. Si la víctima hubiera recibido el impacto en un pie y no en la cara, otro sería el caso y la sanción.
«Si para Soto y Mujica eso no es un trágico accidente, para muchos sí lo es y para todo observador imparcial, 12 años y 183 días de cárcel es una pena desproporcionada».
Un perito balístico afirmó en el juicio que con la escopeta usada por Maturana 'a una distancia de 51 metros… en un ángulo de tiro de 3 grados debe apuntar 2,97 metros por sobre el punto de impacto', calificando de fortuito el incidente.
Al parecer, Soto y Mujica no han leído su propio peritaje, donde nunca demuestran la altura del disparo, sino que establecen una causalidad inversa: donde dado que la víctima fue impactada, el disparo debió necesariamente haber sido hecho a menos de 10 grados. Otro perito balístico, analizando los videos y fotos, afirma que el disparo se hizo a más de 22 grados. De hecho, Soto y Mujica no usaron en su peritaje un potro de disparo (tipo trípode) y solo dispararon hasta 10 metros, el resto lo extrapolan en el computador, pero sin considerar velocidad ni dirección del viento, altura del que dispara (a una misma inclinación un disparo de Le Bron James y uno mío tendrán trayectorias muy distintas). Respecto de la temperatura, en el informe de Rojas y Soto de fecha 15/5/2020 señalan: 'Adicionalmente se determinó al momento del impacto a 51 metros todos los proyectiles llegan rotando, siendo imposible predecir en qué orientación ocurre el impacto, además todos llegan emitiendo gases, con una temperatura de entre 150 y 220 ºC'.
El capitán Maturana, sin entrenamiento adecuado, cumple una orden en tres segundos y dispara a 51 metros sin apuntar (el proyectil si se apunta a esa distancia pasará por un radio de 1,60 metros del blanco, según ellos reconocen en su carta), a contrario sensu, Maturana apuntando a cualquier lugar hasta 3,20 metros de la víctima (considerando el diámetro) pudo impactarla igual.
Si para Soto y Mujica eso no es un trágico accidente, para muchos sí lo es y para todo observador imparcial, 12 años y 183 días de cárcel es una pena desproporcionada.
Las opiniones expresadas en esta publicación son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan las de Fundación para el Progreso, ni las de su Directorio, Senior Fellows u otros miembros.
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