En 2016, un gobierno de izquierda, liderado por la Presidenta Bachelet, presentó un proyecto de ley para que las policías pudiesen controlar a cualquier persona. No importaba si era joven o viejo, tampoco si andaba con un paraguas, un cuchillo o durmiendo en la plaza. Sus congresistas votaron a favor y, después de discusiones y polémicas, se aprobó, aunque sólo para mayores de 18 años.
Leer más«La libertad no se pierde por
quienes se esmeran en atacarla, sino por quienes
no son capaces de defenderla»