El diagnóstico es que las instituciones existentes (Harvard, Yale, Stanford, etc.,) están irremediablemente perdidas en manos de activistas de izquierda que las han capturado, tanto en su burocracia, como en su profesorado, llevándolas a una progresiva y dañina decadencia.
Leer más«El progreso no es una bendición ininterrumpida.
A menudo viene con sacrificios y luchas.»